El veganismo es la práctica del antiespecismo. Es llevar a cabo una conducta que no conlleva la explotación de animales, ni crueldad en su contra, en la medida posible y práctico. En el Siglo XXI, la concepción del veganismo, y la conducta relacionada con llevar un estilo de vida vegano, se está ampliando. Las generaciones más jóvenes rechazan la explotación y las prácticas discriminatorias en todas sus formas— no solamente la explotación de animales en las industrias de mascotas, piel de animal, las granjas, la pesca y los laboratorios, pero también la degradación de los recursos del planeta, las desigualdades sociales debidas al género, la clase, la orientación sexual, la raza y la etnicidad. El resultado es un movimiento que rechaza los sistemas y valores económicos, sociales y políticos tradicionales que dependen de la desigualdad y la explotación.
Este artículo trata sobre el papel que juega el veganismo dentro de este movimiento. Dará un resumen del veganismo clásico, y como en el Siglo XXI, el veganismo se ha situado como un reconocido movimiento político para desmantelar sistemas opresivos y explotadores, además de señalar algunos nuevos retos que enfrenta el movimiento.
Inicios del veganismo
El término vegano fue acuñado por primera vez por el inglés Donald Watson, quien cofundó la Vegan Society para unir a personas que practican el veganismo. Watson definió el veganismo como “una filosofía de vida que excluye todas las formas de explotación y crueldad hacia el reino animal e incluye una reverencia a la vida. En la práctica se aplica siguiendo una dieta vegetariana pura y anima el uso de alternativas para todas las materias derivadas parcial o totalmente de animales”. Como defensor de los derechos de los animales, Watson comparó la explotación animal con la explotación humana y con la esclavitud.
Asociación política y social del Siglo XXI
En este siglo, identificarse como vegano puede tener connotaciones que van más allá de practicar la antiespecismo y evitar la explotación y crueldad hacia los animales.
- Veganismo como una lucha para desmantelar estructuras políticas y sociales perjudiciales hacia el medio ambiente, la humanidad, y los animales
Un estilo de vida vegano es un elemento esencial de la lucha por desmantelar las estructuras políticas y sociales perjudiciales, y crear sistemas más equitativos. Es un componente del principio básico de igualdad, según el cual no somos libres hasta que todos somos libres, y no hay justicia hasta que haya justicia para todos. El veganismo entra en la conversación para incluir a los animales cuando usamos la palabra “todos”. Desafía la presunción de la sociedad de que nuestra especie determina nuestro valor moral en la sociedad.
Como concepto político, el veganismo se asocia más con la izquierda política debido a su naturaleza revolucionaria que requiere un cambio radical en nuestros sistemas de producción y poder, y la forma en que nos relacionamos con los seres con quienes compartimos este planeta. El veganismo desconfía del sistema económico capitalista en general, ya que el capitalismo valora la propiedad privada, la competencia para recursos y beneficios, y recompensa mayor producción a bajo costo. Esto tiene el potencial para despersonificar a los individuos que trabajan en este sistema, limitar los recursos accesibles para los que tienen menos poder, y resultar en una degradación del medio ambiente y la vida silvestre.
- El veganismo como boicot colectivo contra la opresión animal
Visto como activismo, el veganismo deja de ser una elección personal o individual de un consumidor reflejando sus valores morales o éticos, y se convierte en una práctica colectiva para boicotear los productos de la explotación animal e implementar una variedad de estrategias para pasar a un mundo sin explotación animal rutinaria. Su objetivo es ejercer presión sobre empresas y políticos para que elijan alternativas no explotadoras si quieren seguir vendiendo productos y generando capital. Esto puede incluir protestar contra empresas y organismos gubernamentales que se benefician de la explotación animal y la subvencionan.
- El veganismo dentro de un movimiento exigiendo conciencia al producir productos y al consumirlos
Como movimiento colectivo, el veganismo también se relaciona con un esfuerzo consciente por evitar comportamientos que apoyen a las empresas explotativas, y los que, en su totalidad, causan daño al ambiente. También exige que las empresas acepten su responsabilidad por las prácticas de producción que cargan y dañan el medio ambiente, y presiona al gobierno para que evite apoyar a estas industrias.
El veganismo se correlaciona con la toma de decisiones conscientes en general, por ejemplo:
- la compra de productos y servicios más sostenibles,
- la conservación de la naturaleza,
- el cuidado de la vida silvestre,
- la consideración de las necesidades de grupos marginalizados y haciendo los cambios necesarios para proveer equidad para estos grupos y que tengan un voz en la sociedad,
- valorar el bienestar comunal y la preservación de la naturaleza,
- consumir menos,
- el rechazo de la explotación de humanos, animales y la naturaleza.
Nuevos retos para veganos éticos en el Siglo XXI
Junto con estas nuevas posibilidades para el veganismo y su papel dentro de los movimientos revolucionarios del Siglo XXI, también surgen nuevos obstáculos y preguntas. Mientras que los productos veganos están más accesibles para los consumidores, algunos de estos productos son producidos por grandes corporaciones asociadas con prácticas como la explotación medioambiental y laboral. Además, muchas de estas empresas siguen explotando a los animales.
Como consumidores, tenemos más acceso a información que no podemos ignorar sobre la falta de sostenibilidad en algunas industrias que aunque son veganas, son insostenibles, como la producción de almendras, aguacates, café y chocolate. Aunque intentamos evitar la explotación y la crueldad en la medida de lo posible, los veganos y los consumidores de productos vegetales a menudo tomamos decisiones difíciles sobre qué productos comprar y a cuáles empresas apoyar, ya que, como en toda industria, hay negocios veganos participan en la explotación de los recursos humanos y el ambiente.
A esto se añade la realidad de que, aunque el veganismo está en auge, se explota y mata a más animales que nunca. Esto lleva a preguntarse si el movimiento vegano tiene el impacto en la protección animal que busca.
Es más, como proponentes de los derechos de animales comentan, el componente de liberación y derechos de los animales del movimiento vegano ha sido diluido. Las propias organizaciones protectoras de animales y veganas han demostrado una preferencia por centrarse en el impacto medioambiental de la agricultura animal o en los beneficios para la salud de seguir una dieta basada en plantas, dejando a un lado la cuestión moral. Aunque tenga más efectos apelar al sentido de la salud o cuido por el planeta, también puede afectar negativamente el compromiso con los animales.
Conclusión
El veganismo, una creencia ética y filosófica relacionada con nuestro trato y uso de los animales, se ha adaptado para desempeñar un papel fundamental en un entorno social y político fuertemente cargado y alimentado por una inminente crisis climática, y una juventud que está desmantelando agresivamente los sistemas que oprimen a los demás y destruyen el medio ambiente. Practicar el veganismo hoy en día puede incluir no solamente opciones de consumo y comportamiento que limiten los productos animales y la crueldad hacia los animales, y tomar las medidas necesarias para influir en los productos disponibles para los demás, sino también alinearnos con otros movimientos y cuestiones que abogan por la no opresión y el cuidado del medio ambiente.
Recursos
- The Vegan Society
- Eating Animals: “All animals are equal, but some animals are more equal than others.”
- Veganismo = Antiespecismo + Estilo de Vida
- El veganismo es justicia alimentaria
- Veganismo: por qué deberíamos verlo como un movimiento político en lugar de una opción dietética
- Tyson Foods Kills 2.4 Billion Animals Every Year. Can It Do Good, Too?
- Child Labor and Slavery in the Chocolate Industry
- From finge to mainstream: how millions got a taste for going vegan